Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


martes, 8 de noviembre de 2011

UN GIMNASIO PARA LA MENTE

Nos dedicamos al cuerpo en exceso. Hay un verdadero culto a la imagen, desde el rostro y su tersura, hasta el cuerpo y su figura. El marketing juega  a favor de lo externo y en ello emplea todo el potencial de seducción que le asegura suculentas ganancias ofreciendo a la gente lo que ésta quiere alcanzar. Acercarse a los modelos de moda del momento, para vivir en la ilusión de que esta cercanía proporciona, de algún modo, un status similar al que ellos ostentan. Sin embargo, este esfuerzo continuado y tirano pronto pone de manifiesto las diferencia con las que cada uno trabaja en sí mismo y nos sitúa, con frecuencia, ante realidades ajeas a los deseos que nunca llegan a  cumplirse provocando el desánimo y el repliegue sobre uno mismo para obviar la derrota y sus consecuencias. Ahí en ese momento es cuando la mente debe estar entrenada para centrar las ideas, recolocar las emociones e impulsar al desafío de aceptarnos como somos, siempre, y estar a gusto con lo que tenemos. Y es que todo radica en la paz interior. Indira Gandhi decía: “Hay que aprender a estar tranquilos en medio de la actividad, y vibrantes de vida…en el reposo”. El secreto está en entrenar la mente para no “forzarlo todo”, gentes y circunstancias, que pretendemos que se adecuen a nosotros. La paz funciona de forma tranquila y libre. Siempre que la vida nos sorprenda hay que buscar ese lugar tranquilo que hay en nuestro corazón para consultarle. No hay más remedio que hacer preguntas. Dirigir a ese sagrado lugar de quietud, que en todos existe, las preguntas adecuadas sobre cómo nos sentimos así: qué causa nuestro malestar, de qué forma debemos actuar, cómo mejorar nuestra emoción al respecto…y otras muchas más…preguntar equivale a ser escuchados y no nos quepa duda, que también respondidos. Debemos entrenar la mente para saber recibir las respuestas, para oír los sonidos del silencio interior, recibir su mensaje y pasar a la acción.
La unidad que nos envuelve nos asegura que no estamos solos. Formamos parte de un TODO siempre atento a sus miembros para que no pierdan el equilibrio porque la desconexión de las partes significa el caos de lo Único.
No debe existir miedo, entonces, siempre están con nosotros.
         “Cuando una mosca mueve sus alas, una brisa recorre el mundo; cuando una mota de polvo cae al suelo, el planeta entero pesa un poco más, y cuando das un pisotón, la tierra se sale ligeramente de su curso. Siempre que ríes, la alegría se propaga como las ondas de un estanque; y cuando estás triste, nadie, en ninguna parte, puede realmente ser feliz.”
NORTON FUSTER ( The phanton toll booth _ La cabina Fantasma)

2 comentarios:

  1. Absolutamente de acuerdo. Gracias por compartirlo.
    Abrazo de luz, Mirta

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  2. Gracias a ti Mirta por leerlo y compartir el sentimiento que conlleva. Un besito

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