Antes de seguir leyendo, tómate unos minutos, coge papel y lápiz, piensa un momento y escribe lo que llegue a tu mente. De verdad que merece la pena hacerlo porque te asombrarás del resultado.
No sigas leyendo.
Te dejo un momento para que contestes a ambas preguntas.
¿Lo has hecho ya?...
Vamos a analizar las respuestas. Sobre la clave de la vida, una de ellas; una de las más importantes, es la propia estabilidad, el equilibrio mental y la gestión sana de las emociones, una vez que hayamos priorizado la salud física en general.
Tod@s nosotr@s nos iremos, rápidamente, a pensar en el amor, los hijos etc… pero antes, mucho antes de todo eso, si nosotr@s no estamos en armonía, seguridad y coherencia con nuestro interior todo irá mal.
A la siguiente pregunta, la referente a ti mims@, la mayoría de los lectores habrán respondido aludiendo a las personas amadas, pocas lo habrán hecho en primera persona, refiriéndose a si mism@s, al menos en un principio. Si, por el contrario, eres de l@s que te has puesto por delante de todo, te doy la enhorabuena. No es egoísmo. Es inteligencia ejecutiva, pura y dura.
Lo primero eres tú, tu equilibrio, tu salud, tu fortaleza en todos los sentidos porque de ti deriva todo y en ti se apoya todo tu mundo y los que están en él. Por eso debes cuidarte de forma integral.
Nadie nos enseña a vivir. En ninguna escuela hay asignaturas en las que aprendamos cómo enfrentarnos a la tristeza, al duelo, al fracaso, a la traición o las euforias de las alegrías momentáneas que también, a veces, trastocan nuestro equilibrio y nuestra conducta. No somos niñ@s, pero no es tarde.
Lee, aprende, escucha, visiona…pero lo más importante, ¡ponlo en práctica!. Poco a poco, día a día, caso a caso porque cualquier pequeño avance en ti, lo será en tu mundo y en quienes están en él.
¿Se te ocurre mejor causa por la que esforzarnos?
