Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


jueves, 10 de noviembre de 2022

TU CIELO EN MI VIDA

 Solamente las personas que tienen mascotas saben lo que es el amor incondicional. 

 

No me gusta la palabra “mascota”. Me suena rara, peyorativa, de menor categoría y que , desde luego, no define para nada lo que significa en la vida de un humano un animal que vive con él.

 



         Quienes no las tienen no lo entienden. Parecen animalitos cercanos a los juguetes. Pero no es así. Los animales que viven contigo son uno más de la familia, e incluso me atrevería a decir que uno de los más sentidos en el corazón.

 

         Nadie, que no les tenga cerca, comprende su amor. El calor que sientes con su mirada, siempre amable; el bienestar que te aportan sus juegos, en los que siempre te incluyen; la bellísima sensación de sentir su cuerpo sobre el tuyo…su cabeza en tu regazo.

 

         Nada peor que tener que despedirnos de ellos. Esa sensación que se asemeja a la de decir adiós a una persona, porque en fondo los humanizamos y lo hacemos porque, incluso, superan a los humanos con un amor incondicional. 

 

Sin esperar nada cambio, respondiendo a las riñas con ronroneos y colitas levantadas moviéndose…y dulcificando nuestra vida con la única intención de hacernos felices.

 

         Mañana te despediremos a ti, mi gata queridísima. Un día que no olvidaré por muchas razones, pero la principal porque tú te vas a tu cielo regalándome tu dulce mirada y diciéndome sin palabras: “ No pasa nada”…seguiré queriéndote desde allí.

 

         Gracias por estos 12 años de amor.

A ti, constante en mi recuerdo, que descanses en un remanso de paz y amor por siempre.

         

domingo, 6 de noviembre de 2022

GENTE ÚNICA

 Hay gente diferente. Gente que te hace la vida fácil. Que no pone barreras y que derriba muros.




Hay gente distinta. Gente que sabe lo que necesitas solo con mirarte, que mantiene abierto su corazón por si alguien quiere acurrucarse un ratito. Hay gente que sabe dar y está dispuesta a recibir. Gente que tiende una mano sin esperar nada a cambio; gente que irradia luz por sí misma iluminando todo lo que pasa a su alrededor.


No es gente imposible. No es inescrutable. No está elevada en un pedestal. No quiere coronas. No tiene adornos.


Es gente sencilla que ni siquiera sabe que es así. Que te ayuda siempre, que te da paz, que es un remanso de alegría. Gente sincera, fiel y leal. Gente comprometida con sus ideales que siempre son buenos para los demás también. Gente que no ve problemas, sino que busca soluciones. Gente que no se queja, que deja atrás el dolor propio para remediar el ajeno. Gente con un ángel especial que cubre con sus alas a quienes necesitan protección.


Esta gente puede estar en cualquier lado, puede ser tu amigo, el vendedor de la fruta, la limpiadora del edificio, la enfermera que te atiende o la persona que se cruza en la calle todos los días contigo a la misma hora. Pero lo mejor de todo, es que esa gente maravillosa… puedes ser Tú.