Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


sábado, 29 de mayo de 2021

EN EL CORAZÓN DE LAS PALABRAS

 

Mis querid@s lectores, con este poema cerramos la entrega de las palabras que dediqué a mi madre en su marcha.

Ha sido muy grato poder compartirlas en este rincón nuestro.

Mi agradecimiento, también, a tod@s los que habéis participado de estas lecturas de los sábados y de los sentimientos que expresan; que no son solamente míos, que serán semejantes a todas las personas que han tenido que despedirse de un ser amado.

Mi corazón con tod@s vosotr@s.



PEREGRINA DEL TIEMPO






Yo quisiera ser peregrina,

 

De tu nuevo tiempo.

 

Quisiera recorrer los caminos,

 

De tu cuerpo adentro.

 

Y llagar mis pies,

 

En tu áspero cemento.

 

Quisiera estar siempre sola

 

Y llevarte conmigo,

 

En mi mochila de intentos.

 

Y poder alcanzarte,

 

En cada suspiro del viento.

 

Correr en las veredas,

 

De tu fresco recuerdo,

 

Saltar sobre tus manos

 

Brincar entre tus dedos.

 

Peregrina de cieno,

 

Aciago, ácido, 

 

amargo y denso.

 

Y volver la cabeza,

 

Ansiosa por verte de nuevo.

 

Y saber que te llevo conmigo

 

A solas, en mi destierro.

 

Y miro y miro…y no te veo.

 

Y ella me dice,

 

Que aún no es tiempo,

 

Que debo esperar

 

A que llegue el sosiego,

 

Pero mi necia espera,

 

Peregrinar quiere

 

Hacia tus vastos reinos…

 

Porque serás ya reina,

 

De tu nuevo cielo

 

Y colmarás de amor 

 

A los que te acogieron,

 

Ganando con ello

 

La victoria al misterio.

 

¡Y no estarás sola,

 

Como yo me siento!.

 

Peregrina de ti,

 

¡Peregrina del tiempo!

 


 

 

 

jueves, 27 de mayo de 2021

PUNTO DE RESCATE

 

Uno, a veces, se tiene que rescatar a sí mismo. Cuando pensamos en rescate siempre se tiene la imagen mental de alguien que se está ahogando, de quién está preso o sujeto a retención, de lo que está en tan mal estado que precisa una ayuda.

Así está la mente cuando se pasa por traumas importantes, por pérdidas, por frustraciones, por errores cometidos que no tienen solución, por dependencias que se reiteran, por pensamientos negativos y por desconsuelos infinitos.


 

En esos casos, cuando todo parece desencajarse, el ser de uno mismo tiene que llamar a su corte a las facultades que le constituyen. Somos el rey del cuerpo y de la mente y el resto de cualidades, buenas o malas, que hay en él y nos deben obediencia. Solo de esa forma podremos gobernarnos.

Frente al soberano supremo que somos de nosotros mismos, hemos de mandar un mensaje a todos nuestros súbditos y comenzar a preguntarlos; ¿qué sucede mente? ¿Por qué estás tan agitada? Y tú, discernimiento, ¿por qué has dejado de funcionar?. ¿Y a ti, ira, para qué apareces tantas veces?. O a ti, tristeza, ¿por qué me invades sin avisar?.

Así hasta que hayamos obtenido respuestas válidas y en ese punto, amablemente, reconducir su dirección.

Tenemos que saber por qué nos sucede el estado en el que estamos. Qué grado de responsabilidad tenemos en él. Si podemos resolver algo. Si estamos dispuestos al compromiso. Si de verdad, queremos lo que deseamos o si hay trazas aún de nuestras debilidades y formas de ser.

No hay otro camino nada más que la claridad mental. El gobierno acertado de uno mismo, no es sencillo. Es mucho más fácil dejarnos caer por nuestros defectos como si de un tobogán se tratase. Es más sencillo sucumbir a los errores y debilidades que sabemos que son nuestros, pero el resultado no es tan esplendoroso como parece cuando optamos por este camino. Todo se reduce a placeres temporales que terminan, a sucesos puntuales que acaban y no siempre bien.

Sé el rey de ti mism@. Gobiérnate con acierto. Llama a la corte a tus súbditos y pon las reglas del juego de tu vida que te hagan feliz sin dañar a nadie.

No es poco.

lunes, 24 de mayo de 2021

UN POCO DE ESPERANZA...

Revisando archivos para recolocar, limpiar u ordenar mi ordenador, encontré uno muy interesante; cuya primera parte os comparto.

Veamos:

 

 

 


 

 

 

“¿Sabías que el universo trabaja contigo y no para ti? No es posible para el Universo darte algo que tú no quieras o crear situaciones para las que no hayas establecido ya una intención en alguna parte de tu realidad. La energía Universal no crea algo de la nada. Sólo crea aquello para lo que ya has establecido el espacio energético en tu propio mundo. Tan pronto como defines el deseo y estableces la intención, estableces las vibraciones que crean la realidad.

 

Comprender esto es la clave para la manifestación de lo que quieres en la vida.

Cuando le rezas a Dios, o a la Fuente, para que “arregle este problema” el universo es incapaz de responderte, porque tú no has creado nada. ¿Estás aceptando la responsabilidad de la situación que has creado, consciente o inconscientemente? No hay creación inconsciente en el Universo, crear es siempre igual. Y tienes que crear el espacio para la solución estableciendo la posibilidad para esa realidad. Podrías pedir ayuda porque sientes que el Universo es mucho más sabio que tú, pero eso no es la verdad de tu ser. Tú tienes toda la sabiduría y el conocimiento del Universo a tu disposición y tu capacidad de utilizarlo sólo está limitada por tu sistema de creencias.”

 

 

Nos habla de esperanza en uno mismo, de confianza plena en ti, de la certeza de tenerlo todo en uno, a solo un paso de poder conectar con ello.

 

          Sería alentador saber que todo está dentro. Que está el deseo y la posibilidad para cumplirse. Que, en definitiva, sólo nosotros podremos crear la sintonía necesaria para hacerlo posible.

 

No hace falta creer o no creer en esto. Hace falta sentirlo, experimentarlo y tocar la contingencia de lo que sucede a partir de un deseo o sentimiento puro; en un segundo…basta esperar.

 

¡Hagámoslo!. Sin prisa.