Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


viernes, 27 de enero de 2012

EL ADN DE LAS EMOCIONES

El código genético que determina cada característica de nuestro cuerpo también existe para el estado emocional y los rasgos de nuestra predisposición a la euforia o a la tristeza. Es una ruta maravillosa y espectacular que sería increíblemente bonito poder rastrear.
         Podemos imaginarnos buceando en las cadenas emocionales de 500 generaciones antepasadas (que son las que se prevén que pueden manifestarse en cada ser individual), descubriendo paraísos e infiernos que llegaran a explicarnos por qué nos comportamos como lo hacemos y de qué forma tenemos pegados a la piel determinados rasgos del temperamento con los que no podemos.
         Igualmente sería toda una aventura poder visualizar nuestras pasadas existencias; ahí quietos en el estupor de sentir en nuestra carne los azotes de otras emociones en protagonistas distintos. Cayendo en pedazos o subiendo gloriosos a lo más alto de la estima.
Podríamos experimentar cada lágrima vertida como un crisol capaz de recoger nuestro dolor y transformarlo. Seríamos capaces de perdernos dulcemente en cada sonrisa recibida, en las caricias y el los tiernos besos que otros labios pusieron sobre los nuestros; esos que sin ser lo que tenemos nos pertenecían sin saberlo.
La aventura de imprimir todas esas sensaciones en nuestro espíritu equivaldría a recomponer el puzle emocional del que estamos hechos. Abriría las puertas del alma para que saliesen los complejos, los temores, las mentiras, los miedos y las culpas con las que cargamos como un pesado saco cada vez más lleno.
Dispuestos a sentirnos eternos decidiríamos qué hacer con los errores acumulados. Sabríamos invertir en felicidad, cada palabra o pujar por el amor, a cada instante. Comeríamos del árbol prohibido porque ya las manzanas se habrían convertido en dulces sabrosos caídos por la ternura. Y la vida, ese sueño permanente de algún dios, estaría a nuestro favor por siempre.
Me gustaría bucear en ti, también. Poder colarme entre tus poros y sentir lo que han sentido los que has sido para conocerte y amarte más.
Hacer de cada instante un tiempo medido sin reloj a golpe de corazón y vivir sabiendo que el sentido está en traspasar la individualidad para gozar de todo lo que no soy yo. De todo lo que no tiene barreras, ni condiciones, ni estereotipos, ni siquiera historia hecha por los que siempre vencen. Gozar infinitamente de sentir que tú y yo…somos lo mismo.

9 comentarios:

  1. El amor mas puro es aquel que se funde en dos corazones...laten... viven...sueñan la misma ilusión.

    El gran creador es la imagen del gran amor que funde en si todo lo creado....y al hacerlo nos funde a los dos en un solo suspiro de anhelos...de deseos...de sueños compartidos.

    Las palabras sonarían huecas...sin sentido si no tubieran esa esencia divina del amor compartido...siempre soñado...siempre esperando mas...y mas...hasta mas allá de la muerte...mas allá de los sueños...mas allá de las simples sensaciones...mas allá de lña distancia que nos separa.

    Cada palabra que escribes es una gota que alimenta esa ilusión de ser...de sentir...de soñar...de flotar en la imaginación de tenerte cerca...de sentirte al alcance de mis ojos.

    Dicen los enamorados que saben de estas cosas...que cuando dos corazones laten al mismo ritmo el universo se estremese porque es turbado el orden divino...la eternidad compartida...el tiempo detenido....!

    Un abrazo...desde la unidad compartida.

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  2. El amor a traves del tiempo es mas fuerte y mas compenetrado,es el solo mirar y comprender lo que dicen los ojos de la persona amada,como decias en un anterior comentario,el lenguaje del cuerpo -llevo 20 años de feliz matrimonio y cada ves el amor es mas fuerte y y maduro pero sin perder la espontaneidad de sus inicios saludos desde veracruz mexico

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  3. Y no será que ya estás viviendo ese condicional?..., El ADN es el último eslavón de la individualidad. Quizás todo lo que nos rodea, como una película, son sucesos de rectificación espiritual. Darse cuenta de ese hecho es ya un paso inmenso. Pero más lo es conducir hacia la comprensión todas las tomas de la película o hacia el perdón.
    Lo que rompe los barrotes y nos libera hacia la eternidad, son efectivamente los momentos en que DISFURTAMOS de no ser nosotros mismos, de lo que nos diferencia. Así lo veo yo.
    Saltemos la barrera y un nuevo orden aparecerá. Cada liberación es la puerta de un Milagro.
    Un beso

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  4. Flor y Nata, ¿me das permiso para colgar esta entrada en un espacio-grupo que comparto en Facebook con otras personas?

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  5. Mis queridos lectores, no sé cual es la razón de no poder contestar cada intervención a pie de ella. Por eso tengo que hacerlo de este modo conjunto. procuraré ser ordenada y que cada uno entendáis que es la vuestra. Tampoco me explico una manía que tengo y es comenzar por el final. Lo hago cuando leo un periódico, una revista o todo lo que deba sser leído. Entonces me asalta un irrefrenable deseo de llegar a la conclusión y a partir de ahí ir entendiendo lo que justifica ese final. Aqui haré lo mismo. Numeraré las intervenciones de la 4 a la 1.

    4.- No sólo te doy permiso, que ni siquieras lo necesitas por mi parte, sino que además te estoy inmensamente agradecida de expandir lo que aqui reflexionamos. Un abrazo

    3.-Xara me ha gustado mucho esta parte de tu comentario: "Quizás todo lo que nos rodea, como una película, son sucesos de rectificación espiritual"...esa es la clave. Llegar a ser "actor y espectador" al mismo tiempo, una bipartición posible siempre que podamos liberarnos de ego y saltar esa barrera de lo individual que tantos límites nos pone. Un beso

    2.-!!Felicidades!!! por haber encontrado esa mirada que completa la tuya y con la que proyectaros al unísino hacia ilusiones comunes. Eso es lo que buscamos todos. Encontrarlo sería parte importantísima de nuestra plenitud. Un abrazo

    1.- Mi tierno y sensible admirador anónimo! cuánta dulzura derrochan tus palabras y de qué forma se posan en el jardín de mi espera. Gracias por tu sentir, por esa conexión que logras al leer lo que escribo y sobre todo, gracias por seguir ahí, en la distancia, para mi.

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    1. Mi esperada musa...cada dia siembras una flor mas en este jardín que cultivo para ti...

      Leerte es un deleite..y descubrir en tus mensajes la voz callada de la confidencia...del secreto compartido es un verdadero placer.

      Viajar junto a tí al leerte es como rozar con tiernos labios la mano que escribe...la mente que se inspira para alimentar la ilusión.

      Un tierno abrazo...quedo "esperando " que suceda lo inesperado...una extraña forma de taoismo que une el deseó con la convicción de la fe....pero no soy chino desafortunadamente.

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  6. Está claro que los últimos serán los primeros, y me alegro en esta ocasión (aunque un poco celosilla) del final de tu intervención, que sigue siendo un encuentro vibrante entre tú y tu admirador.
    Gracias y enhorabuena!

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  7. Flor y Nata, discúlpame que estoy haciéndo sobre tí una proyección que no mereces. Y acabo de percibirlo. En compensación te traigo, os traigo, un poema maravilloso que hoy me ha ayudado a despegar los párpados.

    Si el amor pierde el eco

    Si el amor pierde el eco,
    o queda yerto tras las sombras,
    sitúalo en el espectro de la luna,
    tramóntalo a las montañas,
    súrtele de nuevos pentagramas,
    vivifícalo en el ulular de las palomas,
    para que siga vivo en los mares, en las alas
    y llegue airoso todas las mañanas,
    con olor a poesía, matizado de aromas;
    el silencio no es bueno si amas,
    si en la mira tienes otro corazón,
    abierto…, con todo su alfabeto,
    sus sinceros brazos, sus manos,
    luchando solo, como el único guerrero,
    contra el silencio y todas las marañas.

    Si el amor pierde el eco,
    en el tañer de una cuerda endeble ,
    para la oreja, otea el horizonte,
    puede que tu corazón esté equivocado
    y eligió una senda sin habla,
    un instrumento desvencijado,
    un falso paraíso, sin nombre;
    vuelve a ti, sólo a ti, es necesario,
    escruta la verdad, vuelve a ser fuego,
    sólo entonces el amor retoñará,
    de su aciago dolor y de su queja
    y tú seguirás siendo un eterno hacedor,
    de otras sendas, de otros parajes,
    para que el amor no se extinga,
    ni mezquine en las tranqueras sus dotes,
    porque el amor a dúo es roñoso,
    cuando no se abren sinceras las puertas
    o no hay lluvia de ternura y de luz en la venas.

    © Javier Villegas (Perú)
    De: “Anochéceme, amanéceme” – Inédito
    © Derechos reservados.

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  8. Xara qué belleza! me ha encantado!!...gracias estrella de nuestro rincón! Besosssss, muchos muchos!

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