Hablar de salvación parece que alude a pensar
antes en condena. Y es que estamos condenados a muchas cosas, a muchas
situaciones, a circunstancias diversas, buenas y malas, a personas diversas que
nos suman o nos restan, a los fantasmas de habitan en nosotros, a nuestros
ángeles y a nuestros demonios.
Un
control interno debemos tener para no perdernos, un código propio, un sistema
de procedimientos que nos equilibre y nos permita seguir una norma, aunque no
se iguale a ninguna, aunque esté, en realidad, fuera de toda norma.
Un
orden de continuar debe acompañar a toda acción. Sólo así podremos mantenernos
y superarnos.
Únicamente
tiene sentido compararse con uno mismo, emitir un juicio e incluso una crítica,
pero de nosotros hacia nosotros.
“…Quién se supera es mayor que el
mismo, se vence en una competición íntima (nos dice José A. Marina en su libro “La
inteligencia ejecutiva”), se trasciende, es decir, va más allá de sus límites”…
“”sobreponerse y aguantarse”…
No es poco lo que nos dice el
profesor: “sobreponerse” a lo que nos suceda, a las mil y una vicisitudes de la
vida, a nuestros propios miedos, a los malos recuerdos, a nuestros errores, a las
frustraciones; y “aguantarse”, eso sí que es duro.
Nos lamentamos de los demás, pero
en realidad lo peor es soportarse a uno mismo. Nuestras manías, nuestros
defectos llenos de auto perdón, nuestros lamentos y quejas, nuestro malhumor,
nuestras bromas particulares, nuestros descontroles, nuestra locura privada o
nuestra tontería puntual.
Salvarse a uno mismo pasa por
aceptar todo eso y trascenderlo. Conocerlo, ser conscientes, saberlo y poder
determinar cuál es nuestro talón de Aquiles para después asumir lo que somos y
comenzar una batalla con nosotros mismos por ser mejores, pero no para el resto
precisamente, sino para uno mismo.
Ese es el reto en el cual consiste
la auto salvación.
https://www.youtube.com/watch?v=SJ1fRT97f9w abrazossss, se cuidan muchoooo!
ResponderEliminarMil gracias por la apotación! Qué duda cabe!...todo pasa por algo, toda persona que se cruza en nuestro camino nos roza el corazón y nos aportan algo!
ResponderEliminarEnormes abrazos***