Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


viernes, 12 de junio de 2015

COMPLACER



Me he pasado la vida complaciendo a los demás. Con ello quería ser su fuente de felicidad, quería proporcionarles placer, bienestar e ilusión. Que estuviesen bien a mi lado y que lo mejor procediese de mí.

Cuando amo esa complacencia la elevo a lo infinito. Muero en el intento de que la otra persona se derrita en la felicidad de estar amando, de que se sienta en una nube de algodón llena de destellos impredecibles a cual más hermoso, de que se deleite con el mayor placer…y en ello, me pierdo yo, pierdo mis necesidades, dejo de recibir lo que preciso y me voy conformando cada vez con menos en tanto que entrego cada vez más. 

Dejo de importarme. Dejo de colocarme en el lugar que me corresponde y me disuelvo en el otro.

He aprendido de golpe, como cuando recibes un bofetón que no esperas, que es un comportamiento erróneo. Que uno no debe dejarse invadir por nadie, ni anularse por él. Que el amor cuando es tal, entrega sin descanso y recibe lo mismo. Y si efectivamente no se recibe lo que se da es porque se está en el lugar equivocado con la persona errónea.

No quiere decir que ambas personas no sean válidas en sí mismas pero sin duda, no juntas.
Comparto esta reflexión que tan interesante me parece.

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“Deja de satisfacer las expectativas de los demás porque esa es la única forma en que puedes suicidarte. No estás aquí para satisfacer las expectativas de nadie y nadie está aquí para satisfacer tus expectativas. Nunca te conviertas en la víctima de las expectativas de los demás y no hagas a nadie víctima de tus expectativas.
Esto es lo que llamo individualidad. Respecta tu propia individualidad y respeta la individualidad de los demás. Nunca interfieras en la vida de nadie y no permitas que nadie interfiera en tu vida. Sólo entonces, un día puedes crecer en la espiritualidad.

De lo contrario, el noventa y nueve por ciento de la gente simplemente se suicida. Toda su vida no es nada sino un suicidio lento. Cumplir esta expectativa, esta expectativa… un día era el padre, un día era la madre, un día era la esposa, el esposo, luego vienen los niños, ellos también esperan. Luego la sociedad, el sacerdote y el político. Por todas partes cada quien está esperando. Y pobre de ti, sólo un pobre ser humano y todo el mundo esperando que tú hagas esto y aquello. Y no puedes cumplir con todas sus expectativas porque son contradictorias.

Te has vuelto loco satisfaciendo las expectativas de los demás. Y no has satisfecho las de ninguno. Nadie es feliz. Estás perdido, agotado y nadie es feliz. 

Hagas lo que hagas, encontrarán las maneras para ser infelices contigo porque no pueden ser felices.

La felicidad es un arte que uno tiene que aprender. No tiene nada que ver con tu hacer o no hacer.  En vez de complacer, aprende el arte de la felicidad.”

http://www.osho.com/es/read/osho/osho-on-topics/plea

2 comentarios:

  1. Como siempre...,vibramos en la misma frecuencia.
    Un abrazo inmenso....!!!!

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  2. Así es Xara... Gracias por estar siempre. Un beso***

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