Eres
una melodía antigua en mis oídos,
La
nana que cantaba mi madre,
para
endulzar mis sueños
el
azúcar en el café caliente,
antes
de vernos.
Eres
el comienzo y el final del cuento,
El
que comienza feliz y termina
Con
una muerte sin duelo.
Eres
el atardecer sin sombras
Que
siempre me encuentro
Cuando
vuelvo a nuestra casa
La
que también es un invento.
Eres
el cristal roto en medio del miedo
Y
sangre caliente de la herida saliendo,
Eres
manantial de gozo y hoguera de cieno,
En
los barrios bajos de mi vientre ajeno,
En
lo suave de mi piel ardiente de terciopelo.
Eres
un saludo y un adiós sin tiempo.
El
que mira fuera pero se queda dentro,
El
que siempre sabe lo que ignora sin saberlo,
Una
gota de agua en el océano,
Una
chispa de fuego en mis adentros.
El
truco en la mesa y la magia en el juego,
Tú,
que te lo crees todo si para ti es bueno.
Levanta
lo ojos y mírate al vuelo
Coge
lo mejor de ti y regálamelo
Sin
lazos ni ornamentos,
Que
ya es tarde y la vida va cediendo,
Las
mentiras y los miedos
en
favor de un poco de amor del bueno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario