Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


miércoles, 22 de junio de 2011

Críticas

La vida nos examina muchas veces. No siempre sabemos que lo va a hacer; es el factor sorpresa el que aplica para pedirnos cuentas. Nos examina, sobre todo, cuando lanzamos una crítica y lo hace para ponernos a prueba. No deberíamos lanzar juicios gratuitos e incluso cuando estos se fundamenten en razones, a nuestro criterio de peso para hacerlo así, pensarlo dos veces es mucho más sensato. Opinar sobre alguien solo expresa un pensamiento personal que no puede transferirse al resto, porque cada uno siente del otro algo que solamente él puede advertir. Nadie veremos igual a una persona determinada porque realmente cada persona será distinta en cada trato y momento. Lo que enjuiciamos negativo y odioso, mañana puede volverse en nuestra contra y sorprendernos a nosotros mismos haciendo lo mismo. Mejor no involucrarnos en emitir juicios sobre nadie. El efecto negativo de la crítica, y  la agresión verbal nos somete a una intoxicación mental que sin darnos cuenta, nos deforma muy a nuestro pesar.  Incluso la fisonomía de las personas malhumoradas, criticonas, agresivas e intolerantes se ve afectada por este negativismo lleno de malas vibraciones. La próxima vez que tengamos ocasión de observar los rasgos físicos reflejados en la cara de una de estas pesonas, debemos hacerlo. Sus cejas fruncidas, esos ojos encogidos de rabia, el ceño de la boca y esa dura expresión que lo envuelve todo dan razón a la popular frase " la cara es el espejo del alma". Porque efectivamente, el que critica, aquel que lanza su rabia para estrellarla en los demás, quien es capaz de endurecer cualquier palabra o mirada por la más insignificante circunstancia...se ve modelado por su propio veneno. La única actitud sensata frente a estas personas tóxicas es desprendernos de ellas, dejarlas ir, soltar la dependencia a la que nos somete hacerlas caso, presentarnos con un escudo de luz capaz de protegernos del inmenso poder que tienen las críticas cuando se reciben y demostrar a quienes las produce...que no son nada más que humo que lleva el viento, en el momento en que no las dejamos entrar en nosotros.
 Nuestra paz no tiene precio, por ello cualquier esfuerzo por protegerla vale la pena.

1 comentario:

  1. A muchos Km de ti pero siempre a tu lado. Y agradeciendo al cielo que existan personas como tu.
    Es estupendo leerte Preciosa
    Un besote

    ResponderEliminar