Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


lunes, 23 de mayo de 2016

UNA HERRAMIENTA MENTAL PODEROSA



Uno tiene que contar con herramientas mentales que le ayuden a superar los malos momentos o las pequeñas incomodidades del día a día.

El trabajo emocional nunca es rápido, ni sencillo, ni inmediato. Pasa por coger hábitos, por iniciar rutinas en las que cada vez nos sintamos más a gusto, por usar la voluntad para dar un paso más allá en las situaciones que lo necesitemos.


Imagino cómo deben ahogar las emociones cuando no sabes cómo hacerlas escapar. Soy consciente del mal que pueden hacernos dentro y estoy segura que muchas de las dolencias que vivimos en nuestro cuerpo parten de esos sentimientos no expresados y a punto de estallar.

Hay que moldear la mente pero para ello debemos buscar herramientas que nos ayuden. Posiblemente, una de las más útiles sea la de “soltar” aquello que llega a ella y nos produce un malestar.

En primer lugar debemos identificar qué es, dónde está el origen de ese momento incómodo en el que nos sentimos mal; una palabra mal dicha, un comentario peor recibido, aquella mirada que no me gustó, una actitud indiferente, palabras hirientes… en definitiva, qué lugar ocupa el desagrado que sentimos.


Una vez identificado, debemos aceptarlo, integrarlo y asumirlo como posible. Efectivamente, el otro tiene su derecho de pensar como quiera, que lo haga, que lo diga, que lo exprese…pero que no me afecte. Para ello debemos empaquetar ese elemento extraño que nos daña y una vez ahí…soltarlo, como si de un globo de gas se tratase. Verlo subir lentamente y alejarse indefinidamente en el ancho cielo.

Me ha gustado una idea que Enrique Simo da en una de sus charlas conferencia; él lo enuncia en inglés porque le confiere más fuerza: “…Is just a thought”… “Es sólo un pensamiento”… Esa rutina es la que nos ayudará a hacer el paquete y lanzarlo al aire.


Todo lo que pasa fuera es sólo un pensamiento dentro. Si no nos gusta, hagámosle la maleta y dejémosle ir.

Hoy comenzamos el lunes con esta reflexión muy práctica.

Pongámosla en práctica. 

Solo encuentro beneficios en ella.


2 comentarios:

  1. Hola Loli. Para mi, otra herramienta es la rendición, la aceptación de lo que es. Creo que cualquier tipo de resistencia es un sufrimiento.
    Un beso.

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  2. Sí efectivamente, esta que propongo no es única y por supuesto, hay una ley que afirma, acertadamente, "que lo que se resiste...persiste".
    No es tanto rendición, sometimiento o sumisión,si no aceptación, como bien dices. Se acepta, se asume, se integra y se disuelve.
    A ello hay que llegar.
    Gracias por el coemntario.*

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