Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


miércoles, 14 de septiembre de 2022

ÚTIL EJERCICIO MENTAL

 No siempre estamos en el mismo sitio, aunque nos pudiese gustar, a veces. La vida nos recoloca. De aquí para allá. Unas veces pareciendo que todo nos va genial y otras, acurrucándonos en un rincón oscuro.



 

Saber guardar el equilibrio no es fácil. Ni demasiada emoción cuando todo es luminoso, ni excesiva angustia cuando deja de serlo. En todo ello, en cualquier momento, lo mejor es pensar que no estamos solos, que de verdad no lo estamos.

 

Hay seres que nos amaban y que seguramente nos cuidan de alguna forma desde esa otra dimensión en la que se encuentran. Hay personas cercanas dispuestas a demostrarnos su afecto, pero sobre todo estás tú. Uno en sí mismo. Uno con el todo que nos constituye. Uno con el cosmos que nos cobija.

 

A veces, es mejor alejarnos de la esperanza cuando esta no es más que una prórroga de la agonía; otras sin embargo, la esperanza es lo que nos mantiene vivos por dentro. Llenos de ilusión y cargados de fuerza para afrontar lo que venga.

 

Hay que ejercitarnos en una especie de juego mental que trae muchos beneficios. Cuando se dude de algo, cuando no esté clara la forma de actuar, cuando no se sabe por qué camino tirar…hagamos la pregunta a nuestro inconsciente cerrando unos segundos los ojos e imaginemos la respuesta viendo un SI o un NO dentro de nuestra mente. No hace falta inventar nada, ni tampoco forzarlo. Solamente deja que la respuesta aparezca. Y aparece con total nitidez. Incluso sirve para cuando tengas que dar una respuesta o dudes si algo lo debes contar o no. Igualmente funciona.

 

Ponlo en práctica. Luego ni falta hará que cierres los ojos. En un instante realizarás el ejercicio con la contestación inmediata. 

 

Guíate por ella porque viene del más allá de tu conciencia, de esa parte de ti que no ves pero que existe, del lugar donde están ya resueltas todas las incógnitas.

 

domingo, 11 de septiembre de 2022

LOS LUGARES MÁGICOS DE LA MENTE

 Hay lugares mágicos en todas las partes. En un rincón de un paisaje, en una esquina de una calle, en un portal, en una escalera, en el bar de enfrente, en una fuente, en unas manos, en la mirada de un recuerdo, en la tela de una manta…y así hasta agotar una interminable lista de refugios con encanto para el alma.



 

Pero de todos ellos, los lugares más extraordinarios a los que poder recurrir, están en la mente.

 

No es difícil llegar a ellos. Basta encontrar un lugar tranquilo, cerrar los ojos y dejarte llevar lentamente por aquellas sensaciones que te dieron bienestar. Así, en el silencio, a solas contigo mismo/a entrarás otra dimensión de tu cerebro, la parte que guarda las sensaciones de dicha, deleite y encanto que nunca olvidaste. 

 

Puede que no estén en la superficie de tu razonamiento lógico. Puede que no aparezcan en tu día a día, ni en el reposo ni la quietud. Este es un ejercicio que va más allá de lo consciente y que se adentra en los laberintos de la conciencia más profunda. Por ello, de forma voluntaria y decidida debes perderte por los caminos de una mente limpia, libre de malestares ni preocupaciones, dedicada únicamente a encontrar los lugares mágicos donde fuiste feliz.

 

Hay que poner empeño en ello. Hay que decidir encontrar la magia que habita en esos lugares, porque ella ya está en ti.

 

 

 

miércoles, 7 de septiembre de 2022

EL ALFEIZAR DE MI VENTANA

 Si pudiera una sola vez nombrarte,

Volarían alondras de mi boca,


Con sus vuelo raso hasta tu alma.





Si pudiera acariciar tu piel de nácar


Y retorcer, hasta hacerlas tuyas,


Todas y cada una de mis palabras.


Si pudiera verte, asomando liviana


En el alfeizar de mi ventana,


Daría mi vida por bien empleada.


Y cada día, de mis pocos días,


Pondría en tu boca


Miel y canela en rama,


Para beberlas de un sorbo


Cuando juntase mis labios


Con las grosellas de tu cara.


Si pudiera mirarte a los ojos


Y nadar en el mar de tu calma,


Dormiría tiempo y tiempo


En lo eterno de tu mirada.


¡Ay si pudiera sentirte cerca,


 en mi cama!


Mis caricias repasarían


La dulce orografía de tus ganas,


Para dejarte luego sumida en un sueño


Del que conmigo, 


no despertaras.

 

domingo, 4 de septiembre de 2022

AMOR SILVER

 No entiendo el amor con otro furor que el que le es propio cuando sucede. No creo que importe la edad porque el sentimiento no va ligado al cuerpo, sino a un sutil estado del alma que no envejece.




 

         Lo amores en los que aparecen, en el principio, las palabras: serenidad, tranquilidad, sosiego, calma, aplomo, equilibrio… y un sin fin de adjetivos más…no me parecen amor. Cierto es que todas esas acepciones son el resultado de un “buen amor” y del tiempo en el que se viva como tal. Pero no soy capaz de asumirlas como inicio.

 

         El amor tiene que revolver el estómago, sacudir todos los órganos por dentro, minar las venas y hacer estallar el corazón. Y no digamos del pensamiento. En ese nido se instala y hecha raíces. La persona chorrea por tu cerebro hasta la punta de tus pies. Te invade su olor, su presencia, sus modos, el peculiar acento de su voz o esa mirada única que pareciese que has descubierto por primera vez para siempre.

 

         No puede ser de otro modo. Los acomodos, si suceden desde un principio, son sospechosos. Ya llegarán, pero no hay prisa porque de parar las sensaciones únicas que provoca el amor y convertirlas en otra cosa…se encarga la vida.

 

         No hay kilates en el amor. Ni es de oro ni de plata, ni joven ni viejo, ni cercano ni lejano. Simplemente es o no es.

 

         Así lo vivo. Así lo he vivido siempre. Así lo viviré hasta que me lo lleve conmigo un día...

miércoles, 31 de agosto de 2022

TERMINA EL VERANO

 El verano es tiempo de emociones, como tiempo de balance es su término. Significa vacaciones, momentos que se suponen alegres, días de fiesta, noches de embrujo y magia por todos los lados. Pero, para muchos sólo ha supuesto discusiones, disgustos y hasta pérdidas.




 

         El verano a veces es veneno. Se reflexiona, se contrastan modos, maneras y formas de actuar que en la rutina se esconden, se camuflan o se mimetizan para no enfrentar posiciones o para no tomar decisiones.

 

         Las parejas se esconden bajo los silencios, detrás de las ausencias, en los encuentros vacíos o en las miradas rehuidas. Allí se instala una monotonía llena de seguridad pero plagada de aburrimiento. Al final, muchos se convencen de que ese aburrimiento es lo mejor. Al menos no se arriesgan a ser felices con los peligros que eso conlleva.

 

         El verano hace balance. Su término nos acerca a los lápices, a los gorros y las manoplas. A días de poco sol y a frío hasta los huesos. Nos llena de adentros y nos impele a quedarnos enroscados dentro del edredón.

 

         Todo se vuelve lento, dentro del movimiento de los comienzos. Todo vuelve a recolocarse en el puzle de nuestro día a día y aunque perdamos ilusión ganamos la tranquilidad, a veces mohína, de tenerlo todo “controlado” en nuestro pequeño cuadrito.

 

         Puede que hayan pasado muchas cosas este verano. Puede que no todo sea bueno o puede que sea aún mejor. Pero de cualquier manera se cierra un ciclo que da paso a la vida normal y con ella a la vuelta a los deseos que pueden cumplirse el verano que está por venir.

 

 

viernes, 26 de agosto de 2022

VIVIR DE SILENCIOS

 Dos palabras:

Te quiero.


Dos vocablos sin tiempo,

Dos ojos que miran

Y ven el amor cayendo.


Un silencio.


Abismo descarnado,

Que mata sin saberlo.

Ayer fue lo que hoy

Sigue siendo.





Tus labios desnudos

de sílabas huyendo,

tu pensamiento,

siempre lleno.


Luciérnagas apagadas

rastreando en fango,

en lodo muriendo.

Calla los gritos sordos

de tu otro pensamiento, 

que hay una nana que espera

A ser arrullo del viento.


¡Cuánto callamos,

Cuánto sin saberlo!.

Cuántos relojes gastamos

En lo que no dijimos

Y se fue huyendo.


En lo no dicho,

En lo que queda en el viento,

Y en las rendijas escondidas

De los castillos en el aire

Que sin querer,

Siempre hacemos.

 

 

martes, 23 de agosto de 2022

LAS CÁRCELES DE NUESTRA MENTE

 La fortaleza más inexpugnable es la mente. Los pensamientos y las creencias constituyen las barreras más sólidas que podamos encontrar. También, en ella, se instalan las claves del equilibrio y la salud emocional y corporal. Por ello, si dominas tu mente, dominas tu universo.




 

         Sin embargo, no todo es tan sencillo. Muchas veces, a lo largo de nuestra vida, estamos atrapados en un sin fin de espacios mentales llenos de barrotes con los que nos confinamos a tener una vida llena de sufrimientos y amarguras.

 

         Descubrir cuáles son tus prisiones, es una tarea imprescindible si se quiere salir de ellas. Y todos las tenemos. Estamos encerrados en sufrimientos antiguos que condicionan los presentes. A veces, los montajes que hacemos en nuestra cabeza dan como resultado historias que incluso no son reales y montamos castillos en los que dejamos libres fantasmas que nos asustan permanentemente.

 

         La llave de estas cárceles que vamos construyendo en el corazón, están lejos. Tan distantes que debemos alejarnos de las escenas que tenemos encerradas para tomar perspectiva y poder verlas de otra forma. La prueba evidente la tenemos en el paso del tiempo. Si miramos con distancia hechos que nos parecieron muy dolorosos en nuestro momento no los vemos igual. Incluso, pueden parecernos nimios. 

 

         Conoce las prisiones de tu mente, mira de cerca lo que hay dentro de ellas, revisa de forma desapegada si eres esclavo y prisionero de alguna historia que has creado en tu mente y luego distánciate. Toma ángulo de visión. Revisa. Valora despacio. Piensa que la vida es más sencilla. Libérate de tus cárceles e imagina cómo sería tu vida sin ellas. Suéltalas y saborea la sensación de libertad que eso va a producirte.

Es el mejor comienzo.