A
ti mi niño, por ser tan especial,
Por
haber nacido para las causas ajenas,
Por
no conocer batalla sin tregua
cuando
se trata del dolor gratuito a sanar,
Por
tu sentido honesto de justicia natural.
Por
tu razonamiento limpio
frente
al impío ajeno y desleal.
Porque
cuando amas,
quieres
de verdad
Sin
cortar la rosa,
dejándola estar.
A
ti que te preocupa el más allá
Un
futuro después de la vida
Que
estás seguro que no habrá.
A
ti, por ser mi dulce amor desde la cuna
A
ti, que eres y siempre serás
La
esperanza de muchos
que
aún están por llegar.
A
este día en el que viste la vida
E
hiciste la mía despertar,
A
ti, que tanto te quiero, niño,
Por
ser tan comprometido y leal,
Contra
las injusticias y desmanes
de
lo mundano y lo social,
Contra
el mal sentimiento de quienes
Protestan
por protestar.
A
ti, que tienes sabiduría para dar y tomar
Y
sin embargo eres tan sencillo y normal
Que
ahí reside tu grandeza,
La
que loquita me tiene
Por
ser tu madre.
en el silencio de tu paz.
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