Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


jueves, 29 de junio de 2023

OLAS DE ESCARCHA

 Cada vez que me salpican

 las olas de tus jadeos,

Noto la escarcha de tu aliento,


Y el frío gélido de tu risa incrédula,


entre mis piernas ardientes 


de impetuoso deseo.




 

Cada vez que te miro, lento


Salen de ti mariposas negras que volando


Se acercan al nido de los polluelos tiernos,


Acechando su bendita inocencia,


Asustando su tímido vuelo. 

 

Y me quedo pensando si todo fue bueno,


Si las mentiras que nos dicen otros,


Somos nosotros los que nos engañamos,


Cuando a ciegas las creemos.

 

Se engaña el corazón si una caricia


Roza lenta la caja de sus sueños,


Se equivoca  con delirio,


Cuando le besan suave 


en el centro de sus centros.

 

Y desnudo de corazas y parapetos,


Se abre ansioso de recibir


el dulce sabor del aliento,


la ternura del roce de unos dedos,


o una sonrisa limpia de miedos.

 

Entre bambalinas y circos viejos,


Más allá de las lágrimas y el pensamiento,


Te debe la vida, un amor verdadero.


Uno de esos que no se borran con el tiempo,


Uno de aquellos que  nunca existieron.

 

Como la Dulcinea que dio vida


El amor puro del caballero viejo.


Como la estela de una estrella


Que ya no existe, 


pero seguimos viendo.

 

 

 

 

 

domingo, 25 de junio de 2023

SONRISAS Y LÁGRIMAS

 

         Decía mi madre, como refrán popular, que “ no todos los ojos lloran al mismo tiempo” y es cierto.

Con ello no quiero decir que cuando algo te sucede, cuando alguien te falla, cuando la vida se pone del revés quieras que a otro le suceda lo mismo. Sin embargo, alivia pensar que hay una justicia natural que a todos nos hace gozar de alegrías y sufrir con penas.




 

         A veces, la vida te abre brechas, en tu día a día, por las que caes sin remedio en medio del desconcierto de no creer lo que te pasa. De la noche a la mañana te han podido dejar de querer, has podido ser víctima de un atropello, de un abandono o de una enfermedad que se ceba contigo. Así sin más, tu vida, a partir de ese segundo en el que lo sabes, cambiará para siempre.

 

         Lo peor de todo es que estamos acostumbrados a pensar que la vida es lineal, continua y segura. Que lo que conseguimos es duradero y que apenas se modificará nada en unos cuantos años y ahí, está el error.

 

         La vida es cambio e impermanencia. En un momento, todo puede cambiar. Tenemos que estar preparados para que suceda lo que no esperamos; y la verdad es que prepararse para lo desconocido es muy complejo. Pero lo que sí podemos reconvertir es la actitud con la que nos enfrentamos al día a día. Saber que nada es para siempre, que todo pasa, que lo que hoy es blanco mañana puede ser negro y sin posibilidad de matices.

         Si ahora ríes, gózalo. Si estás llorando ten paciencia porque todo se acaba, hasta lo mejor.