Abriendo la puerta...

"Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera"

Francoise de la Rochefoucauld


miércoles, 7 de junio de 2023

LO DIFÍCIL DEL " SI"

 Responder “si” a cualquier cuestión, problema u opción siempre implica un compromiso, una entrega o una disposición a la acción. Es cierto que lo afirmativo pareciese que acerca, que suma, que une o que acepta. Pero lleva implícito toda una carga amplia de responsabilidad que asumimos en la afirmación.

         Decir “no” pone una barrera. Separa, anula y dibuja un cerco ante el cual no se puede pasar.





         He conocido personas que siempre tienen el “no” en la boca, pronunciado con una facilidad aterradora. Personas que mantienen ese “no” y lo cumplen; lo que sin duda dificulta mucho su trato. También he conocido personas que se aferran al “no” de palabra y sin embargo, más tarde, se desmontan de la negatividad para  conceder lo que han negado previamente dejando el mérito de sus actos sin efecto.


         Decir una cosa o la otra, siempre, no es aconsejable.

 

    Aceptar demasiado te deja a merced de los desalmados, de los que atropellan y de aquellas personas desconsideradas que se encuentran entre la gente normal. 


         Negar continuamente te somete al ostracismo. Te aleja, te despoja de la empatía y te retira lejos del encuentro y te obliga a permanecer en la otra orilla de la persona.


         Como siempre, el equilibrio está en saber cuándo es necesario utilizar una de las dos respuestas. 


    Debemos ser lo suficientemente serenos/as como para poder parar unos segundos antes de decantarnos por una u otra opción y saber que cada una de ellas tiene consecuencias que van más allá del momento e incluso del motivo de la respuesta.


Nunca te instales en una sola de ellas o la víctima serás tú.