En
chocolate bien caliente
hundiría mi deseo en tu mirada,
como
dulce espuma de cacao
rozaría
tus labios en mi algarada,
como
azúcar glas en polvo
rozaría
tu lengua abandonada,
y
esperaría tu respuesta ávida
de
sensaciones nuevas camufladas.
Como
chocolate caliente te ofrecería
Mis
ganas siempre emborrachadas,
De
días breves y noches acaneladas.
Sabiéndote
loco por mi cuerpo
Encendido
como mecha desbordada,
Y
conociendo tu salvaje forma
De
ser uno aún con la nada.
Estaría
presente para demostrarte
Que
soy de carne y hueso cincelada,
Por
tu pasión incontenible
Con
la que sin quitarme ropa, me destapas.
Te
dejo el chocolate caliente
A
la orilla de tu boca amarga,
Para
que se endulcen tus besos
Cuando
los des,
a
cualquier mujer deseada.
Sea
yo, sea otra o no haya nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario