HACER " COMO SI..."

         He llegado a la conclusión de que un buen método para llegar a conseguir lo que nos proponemos es “Hacer como si…ya estuviese conseguido”. 

De alguna manera el cerebro se prepara. El espíritu también.  La actitud se acomoda a lo que cree conseguido y esa disposición es suficiente para que cada fase de la conquista se produzca sin dificultad.

“Hacer como si…” equivale a actuar de una forma distinta. Del modo que se precisaría en el caso que estuviese conseguido el objetivo. 

Sin darnos cuenta, poco a poco, el milagro se produce. Dejamos de poner barreras invisibles ligadas a estados inconscientes que impiden desplegar todo nuestro potencial. Nos creemos capaces de lograrlo y finalmente, lo logramos.

En realidad, creer que ya está conseguido sirve hasta con los demás. Nuestra intención incide en el logro siempre. Todo está conectado. Todos lo estamos. Cuando sucede algo en la vida de alguien cercano, tiene una incidencia en las emociones propias, en el mapa de desarrollo de los sentimientos colectivos y en esa ruta personal que incluye caminos ajenos para poder avanzar en su trazado.

Es un método eficaz de crear sucesos, de favorecerlos, de esperarlos y saber que sucederán. Implica fe. Necesita de creencia firme. Precisa del corazón para ser real.

Hay que posicionarse en un modo de apreciar las circunstancias, global, proyectivo y aéreo. Muchas veces nos dejamos llevar los lo que sucede ahora mismo, pero eso tienen poca vigencia determinativa porque el camino es más largo y la carrera de fondo.

La esperanza y la fe ciega en que finalmente sucederá serán las mejores pócimas para que la magia opere. 

Esto tengo que aplicarlo tantas veces a mi misma que estoy empezando a hacerlo un hábito y con ello, a automatizar el milagro de que, al menos, me siento mejor que cuando no me encierro en lo negativo de lo que parece un fracaso, una desgracia o un conjunto de caos alrededor de mí.

Ponlo a prueba. Solo hay ventajas.