Y NACISTE TÚ...

Y naciste tú cuando no te esperaba,

Y llegaste llena de fuerza y ganas,

Asomaste a la vida con serena prisa

Mientras en tu boca ya había una sonrisa

Volviste tu rostro y parecías un hada

Blanca, suave y radiante

Como la mejor pieza de porcelana.

Salvaste mi mundo en aquella época

Donde cada día era una batalla

Y llegaste para mandar callar

Al mismo demonio de la manada.

Eras diferente, hecha de valor y agallas

altiva, compasiva, dura y blanda.

Y mientras tanto la vida a ella se la llevaba

Para dejar en ti la mejor heredera

De su fuerza y sus mente  clara.

Y ahora arrasas con tu genio y tu alma

A dónde vas no queda igual nada

Y tu huella no es cicatriz, 

sino caricia enamorada.

A ti por haber nacido de mí aquella mañana,

Cuando sin saberlo me traías de nuevo

 lo que sin remedio se marchaba.

Por ti brindo en el fondo de tu mirada

Para que seas feliz siempre

Y brilles única en el mundo que te abraza.

Por ti y por lo que aún queda 

De sorprenderte cada mañana.