No hace falta un día en el calendario para señalar que hemos de expresar el amor. No hace falta que existan los regalos, ni que las palabras bonitas se derrochen hoy para cubrir de rosas lo que se siente.
El amor no necesita nada ni de nadie para sobrevivir. Se basta a sí mismo. Se retroalimenta continuamente y para ello ni siquiera debe estar presente, ni ausente, la persona amada.
El amor siempre crea. Una y otra vez. En uno y otro tiempo. No requiere contraprestaciones, ni sabe de intereses, ni se esconde en los brillos de los precios, ni en el esplendor de lo aparente. El amor ES y sabe SER aún cuando el que ama parece que se ha ido. Nadie puede abandonarlo sin su permiso. Nadie darle de lado si él no está de acuerdo. El abandono es una falacia cuando él ha vencido. Ni el desdén, ni el rechazo, ni la indiferencia pueden arrinconarlo. Por encima del sujeto amado está él y luce con luz propia. Encaramado en lo alto de nuestra alma puede permanecer mudo, ciego, quieto y silencioso pero siempre presente y determinante.
El amor brota sin cesar cuando piensa, idea, maquina, recrea, ensueña y fascina la mente. Hace siervo al corazón y encadena para siempre la razón. Cuando está presente juega sin medida en la plenitud de saberse dueño. Amo de la admiración, estratega de la cordura y tesorero del inmenso poder de la ilusión.
Tan solo su presencia nos imanta y nos deja pegados a sus labios de nata. Suave y zalamero, tierno y afable o arrebatador e indolente se pasea por al almenas de nuestro castillo para someternos a sus arrebatadores delirios. Dispuesto siempre a demostrarnos que no depende de nosotros; una y otra vez, nos toma de la mano para lanzarnos al infinito desde el abismo del desprecio o desde la cima del entusiasmo.
Nunca duerme, siempre está alerta. En ocasiones su descanso es nuestro espejismo. Cuando creemos que no volverá más, nos sacude para recordarnos que nunca se fue. Y entonces, lentamente, recorremos de nuevo los laberintos de su interior para aprender mejor la lección que está pendiente: que el amor y la admiración van de la mano y que sin ella…el amor tiene siempre un nombre distinto.
Tienes razón...el amor no duerme...vive en el instante eterno y el intemporal de la ilusión..!
ResponderEliminarSutil soplo de la divinidad..!
ESTÁ y lo ES TODO...aún cuando parece no estar...siempre ESPERA...!
ResponderEliminar"Amo de la admiración, estratega de la cordura y tesorero del inmenso poder de la ilusión"..., me encanta esto que dices.
ResponderEliminarCómo pudo el ser humano inverntar esta palabra. Porque hay miles de palabras limitadas por su concepto, y el lugar donde se dice; pero ésta, AMOR, ¿Cómo pudo la Naturaleza humana porner nombre a semejante sentimiento?, si es imposible describirlo!!! por más que lo intentamos.
Un beso aproximado.
Cierto Xara, nombrarlo es ya alterarlo. Purísimo debe vagar en el centro mismo de la intuición...en el instante continuo del tiempo eterno que recoge pasado, presente y futuro. Para siempre y por siempre...será lo que justifique la vida.
ResponderEliminarAmor-una palabra que describe al Ser Supremo-fuimos creados despues de existir la palabra AMOR como tratar de entenderla si existimos por causa de ella solo nos queda vivirla en la plenitud que podamos y seamos capaces de vivirlo y no solo hoy en su dia "comercial"el Amor es ayer hoy y siempre nunca deja de estar ahi donde menos lo esperamos -es comunion con la fuente viva del Ser Supremo - saludos a todos y vivan el Amor siempre veracruz
ResponderEliminarCuánto me gusta la descripción del Amor de François Mauriac. Nos trata como seres antorcha. Cierto también, y él pudo comprobarlo muy directamente, que cuando se apagan, el frío nos invade..., por eso hay que buscar siempre el calor, la llama aunque sea mínima, que puede encender y hcer feliz el milagro de la vida. Ay! si todos lo tuviéramos tan claro...
ResponderEliminarUn millón de besos
Amigo de Veracruz, Xara...efectivamente sólo queda vivirlo!!...no puede apresarse con la palabra, ni moldearse con el pensamiento, ni ajustarse al YO, ni al TÚ. Estar en Él es saberse pleno para poder regalarnos.
ResponderEliminarAntorchas...qué bonita imagen!...Besos de buenas noches
AMOR no es lo que se quiere sentir, si no lo que se siente sin querer.
ResponderEliminar( esto lo lei en algun sitio...)
Para mi Amor es hacer mia la felicidad del otr@
Un AMOROSO abrazo a tod@S!
Domingo te echaba de menos! qué pronto nos acostumbramos a los afectos...!!.
ResponderEliminarEs un hermoso ángulo desde el que sentir el amor. Efectivamente...cuando la felicidad del otro es la tuya...el resto de las palabras sobran.
Un abrazo!!