Hay
que perder, soltar aquello que no nos hace bien, aunque sea algo por lo que
luchamos y creímos tiempo atrás.
No
se puede estar todo el tiempo hablando de los sufrimientos e injusticias que
vivimos, tenemos que estar dispuestos a soltar, dejar atrás… perder para ganar.
Claro
que vas a sufrir, vas a llorar, pero ¿qué vale más? Supondrá un tiempo en
silencio, haciendo una limpieza interior para poder salir a la luz, para poder
darle a la vida otra oportunidad y tratar de vivir en forma tranquila.
Por miedo a la soledad acabamos aferrándonos a los recuerdos, a lo que hemos ganado y a lo que llevamos tiempo guardando. Todo en la vida cuesta esfuerzo, por eso cuesta soltar y perder. Pero nada en esta vida nos pertenece, ni siquiera nuestra propia vida, todo es prestado, nada es eterno… por eso te invito a hacer esta reflexión: muchas veces debemos perder para levantarnos y ganar de nuevo.
Recuerda
cómo era tu vida antes que llegasen tantos problemas y el sufrimiento se
anidase en sus corazones. ¿Dónde quedó esa persona que eras antes, con sueños
de éxito y proyectos realizados? ¿Dónde está esa persona luchadora que más de
alguna vez fue modelo a seguir para otras personas? ¿Qué fue de aquella persona
con propósito y visión que una vez fuiste?
Intenta buscar dentro de tu ser qué pasó con aquella
persona que una vez fuiste, y vuelve a pensar que eres muy especial.
Vuelve
a creer en ti, en tu capacidad de amar y progresar en lo que te
propongas.
Vuelve a pensar que si quieres trabajar en algo, podrás hacerlo.
Vuelve a ser una persona segura de sí misma, como lo has sido en el pasado, más que ahora... antes de que llegaran esas personas que te acabaron anulando por completo.
" Sé como el clavo enmohecido que aun viejo y ruin vuelve a ser clavo".
ResponderEliminar"Ni un paso atrás....ni para tomar impulzo! " ...dicho montañero.
Sí nunca rendirse!!...ni aún rendido.
ResponderEliminarGracias***