No hay mayor muro que la incomprensión.
Nada parecido a no querer entender al otro, nada igual a no querer abrir la
puerta de la mente para que no pase algo distinto a lo que hay en ella.
Cuando
lo que vemos es el puntito negro en la llanura blanca, cuando nuestro criterio
se ciñe a lo único que quema es imposible que nuestros pasos vayan a la par
porque no hay espacio suficiente en el caminar de aquel que en todo ve un
tropiezo. Pero ¡qué difícil es demostrar nuestras verdades o hacer más evidente
lo obvio cuando no quiere verse.!!
Qué
poco ayudamos a vivir a los demás cuando nos duele hasta la sonrisa cercana.
Qué lástima no poder llenar de luz la mirada del que todo lo ve negro.
El
que vive alimentándose de su propio veneno no puede sino repartir el virus de
su propia amargura.
Cuánto dolor se distribuye en el
torbellino de su tormento y qué frágil es en el fondo su corazón que no puede
estremecerse ante el débil o el afligido, ni sentir más que odio ante quien se
muestra feliz.
Por desgracia hay que convivir con
seres oscuros, tan tóxicos para sí mismos como molestos para el resto y todo
ello sin poder ayudarles a ver que lo único que es válido en esta experiencia
vital es hacer felices a los demás mientras lo vamos siendo nosotros.
Las
cosas siempre son sustituibles, mejores o peores, mayores o menores, pero en
cualquier caso siempre existentes.
Los
recuerdos, las vivencias, el éxtasis o el dolor…nunca caducan. Siempre están
reposando como estratos en el fondo del alma, dispuestos a servir de colchón en
los momentos en los que desplomarnos es tan fácil como respirar. Por eso quiero
coleccionar emociones, una tras otra y no perderme ninguna.
Me
urge tragarme de un sorbo el mundo de este instante que no vuelve o del
siguiente en el que aún me siento viva.
A
ratos me arrepiento de lo que no he reído, de lo que no he abrazado, de lo que
no he besado…de pensamientos dulces que no he tenido, de las lágrimas que me he
tragado, de la dicha que se me ha escapado.
Ahora
no quiero perderme ni un instante de la vida. Ya no.
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