“…Un hombre oyó una noche que alguien andaba por su casa. Se levantó y, para tener luz, intentó sacar chispas del pedernal para encender su mechero. Pero el ladrón causante del ruido, vino a colocarse ante él y, cada vez que una chispa tocaba la mecha, la apagaba discretamente con el dedo. Y el hombre, creyendo que la mecha estaba mojada, no logró ver al ladrón.
También en tu corazón hay alguien que apaga el fuego, pero tú no lo ves. “
Rumi.¿Puede alguien darnos una interpretación de este breve episodio?.
¡Gracias por la luz de la mecha encendida!
Muchas veces nos negamos el derecho a amar y a ser amados.
ResponderEliminarLa chispa brilla y la apagamos por timidéz, por temor, por egoismo y siempre encontraremos un pretexto para justificarnos.
E ladrón del amor es uno mismo que se niega la luz.
"Quiero que brilles y tu luz me enceguezca.
Ciego te buscaré porque tu luz me guia.
Basta sentir tu calor en el universo de mi mente para amar la luz que irradias".
(poema "sufi" de autor anónimo)
Así lo entiendo también yo. El amor está cerca, y el ladrón también. Sacar conclusiones anticipadas sobre porqué no tenemos amor, como dice el cuento, deduzco que la mecha está mojada, y obvio todos los otros sentidos. La intuición queda anulada en el momento en que justifico lo que ocurre. Y el ladrón, ese lado obscuro que desaparecería con sólo mirar, sentir, tocar...,se hace poderoso ante los fatalismos que mi mente crea.
ResponderEliminarEl último poema sufí que nos deja "anónimo" me sugiere que cuando ponemos en "otro" toda la proyección de nuestra luz, nos quedamos fríos y ciegos en su ausencia. La luz se comparte pero no se apaga con el Amor.
Muchos besos y gracias por el trato "especial" que me otorgas, Flor y Nata, eres muy generosa.
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ResponderEliminar!! Genial!! es la interpretación exacta!!...nosotros mismos apagamos la llama; nuestros prejuicios, los miedos, las inseguridades y todo lo que llevamos prendido en el corazón que lo atenaza y axfisia.
ResponderEliminarLiberarlo de ataduras es nuestra gran tarea!...a veces somos nuestro mejor carcelero.
¿Cómo encontrar la llave que siempre lo abra todo? ¿En qué parte de nuestro interior estará perdida?...cómo reconquistar el territorio que perdimos durmiendo?...
Os quiero!